Fuente original: D. GARCIA ALMORABID (Crónica del siglo XIII)
(Ed- Eusebio López, Tolosa, 1888)
Arturo Campion (1854-1937)
Capitulo III: En la montaña . Página 51
Delante de cada grupo, marchaban unos cuantos músicos, con tamboriles, descomunales cuernos y retorcidas trompas. Resonó un canto monotono, y de notas muy profundas y prolongadas, una especie de bramido, una melodía bestial, potente y atemorizadora, algo semejante á las voces de la tierra, á los alaridos de los bosques, tan intensamente trisle que pareció que se pintaba con negras ondas, en el azul luminoso del cielo. D. Garcia miró en dirección á Pamplona, orientándose por la silueta cónica de la Higa de Monreal y sin saber porqué, blanco de enternecimiento irresistible, aunque su corazón era de hierro, lloró silenciosamente.
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Autor: Arturo Campion (1854-1937)Fecha: 01/06/1888